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🟢 Los cambios en el Seder

Sé que muchas personas en estos días se acercan a distintas fuentes tratando de obtener la mejor información acerca de cómo celebrar Pésaj, buscando agradar al Creador haciendo las cosas de la mejor manera. Y ello es algo hermoso y que nos tiene que poner muy felices. He leído que algunos requiriendo información acerca de cómo hacerlo reciben como respuesta “yo sigo las indicaciones de los judíos porque hacen lo mismo desde siempre”. Debo decir que desgraciadamente quienes dicen esto no están del todo acertados. El judaísmo religioso, principalmente rabínico, se ha ido adaptando durante años a varias circunstancias históricas que han cambiado sus ritos y observaciones. Pero, aun cuando no deseen reconocerlo, dos eventos marcaron fuertemente cambios rituales. Me refiero al surgimiento de los creyentes en Yeshúa y a la destrucción del Segundo Templo en el año 70 d.C. Ambos eventos se encuentran relacionados por cuanto fue el mismo YHWH quien permitió que el Templo fuese destruido, el mismo YHWH que fue crucificado y que entregó su Vida por nuestras transgresiones.
El Seder de Pésaj judío que cualquiera puede consultar, contiene las llamadas 4 preguntas de los niños. La palabra seder significa orden, o sea se brinda el orden en el cual las cosas deben ser hechas en esa cena especial que es conocida como “Pésaj” aun cuando en realidad el “Pésaj” es el cordero sacrificado. Según muchos entienden también es correcto denominar “Pésaj” a la cena que se realiza luego de finalizado el día 14, o sea al comienzo del día 15 del Abib. Lo cual coincide con el primer día de Panes sin Levadura. Quien lee ese “seder de Pésaj” y lo sigue podría pensar que eso está escrito y se ha mantenido desde antes de Yeshúa. Lo cual los rabinos desean que todos crean. Sin embargo la realidad es diferente.
En otras ocasiones he escrito que el Talmud, si bien no es algo para seguir, sí tiene la utilidad de constituir un registro histórico que permite ver los cambios y contramarchas del judaísmo rabínico. Precisamente uno de los tratados más importantes del Talmud, el Tratado Pesajim contiene las disposiciones rabínicas sobre la noche en que se realiza la cena de Pésaj. Este antiguo tratado, en Pesajim 10:4, refiriéndose a la enseñanza del padre a los hijos en el momento de la cena, si son pequeños y no saben preguntar les dirá: “¿En qué se diferencia esta noche de todas las noches?…  en que todas las noches podemos comer carne asada, hervida o cocida, mientras que en esta noche sólo comemos carne asada;…”
Esto es lo que se decía en el ritual de Pésaj en tiempos de Yeshúa. Sin embargo si usted lee las guías correspondientes a estos tiempos verá que no existe una pregunta de los niños o una indicación de los padres acerca de comer carne asada. Por más que rebusque la guía que el judaísmo rabínico y sus seguidores le proporcionan verá que no menciona esto. Y la nuestra tampoco. ¿Acaso ellos y nosotros nos hemos olvidado de esta parte? Por supuesto que no, el sacrificio de Yeshúa y la destrucción del Templo van de la mano. Y por distintos motivos tanto los que lo niegan, como nosotros que creemos en el Hijo de YHWH, ahora no tenemos sentido para esa pregunta.
Los que siguen las disposiciones de los rabinos luego de la destrucción del Templo se vieron obligados a quitar la pregunta sobre el cordero  asado porque sin Templo ya no podían hacer sacrificios.
Quienes creemos en Yeshúa sabemos que el cordero fue sacrificado en la cruz de su ejecución y ya su mención en el seder de Pésaj no corresponde. Pues ahora lo vemos y adoramos en la alegría de su resurrección, pues ya ningún sacrifico expiatorio es necesario.
Ricardo.
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